Breve historia de una inminente catástrofe

Como si San Isidro necesitara más góndolas, va a llegar a Becar en plena zona urbana y densamente poblada, un monstruo de cemento (160.000.m2 de superficie cubierta y 3.600 cocheras), el Hipermercado mas grande de América- Jumbo- con gravísimo perjuicio ambiental, y socio-económico.
Este suceso comienza con las escandalosas privatizaciones de Empresas Públicas operadas durante el menemato-Ley 23396- Cavallo, y sus bandas dispusieron la venta de 20 Has. En las que funcionaba la Fábrica de Productos Químicos de la ex O.S.N, último pulmón verde en San Isidro que forma de reserva única e irremplazable. No existe en todo el partido un predio de características similares, por su tamaño, escasa edificación y arboleda añosa.
Esta venta, realizada por el Ministerio de Economía, se perfeccionó en el municipio en el año 1996, cuando a instancias del Ejecutivo Municipal, el Concejo Deliberante (deliberantes y justicialistas) aprueban la 3ra rezonificación mediante la ordenanza Nº 7426, que permitió la instalación de centros comerciales, modificando lo que era Reserva Urbana y Educativa.

La Asociación de Vecinos de Becar y San Isidro, calificó en su momento a esta decisión de peligrosa, apresurada y sin visión de futuro ya que respondía claramente a urgencias económicas y especulaciones cortoplacistas. No hubo, ni hay, proyección hacia el porvenir. Y así lo puso de relieve en un recurso de amparo presentado en el Juzgado Civil y Comercial Nº 3 de San Isidro, que declaró que la ordenanza carecía de validez jurídica por haber omitido el intendente la intervención previa de la Provincia, conforme a las leyes vigentes (8912 de protección de suelo y 11723 de impacto ambiental).

Antes de la venta, el Municipio pudo haber solicitado al Gobierno Nacional la cesión gratuita del terreno para su utilización como espacio verde público y con fines recreativos por aplicación de la ley 24146, vigente desde el 93 hasta el 2000, y no lo hizo, tal como lo concretó Vicente López con 3 inmuebles.

Hoy rige en la provincia la ley 12573, dictada el 21 de Diciembre del 2000, que limita considerablemente las medidas de las grandes superficies comerciales (no mas de 1800 m2 en municipios de mas de 300.000 habitantes como nuestro caso) Increíblemente, Jumbo, no acepta esa reducción por que sostienen que en el año 2000 estaban tramitando la aprobación en la Provincia, como si el tramite fuese un derecho adquirido.

El gobernador Solá, después de 5 años de tramitaciones, aprobó, extrañamente lo actuado por la municipalidad mediante decreto Nº 2248/02, diciendo en un considerado que lo hacia “bajo exclusiva responsabilidad de los Organismos Técnicos competentes de la provincia”. Se cuida muy bien de mencionar los límites establecidos por la ley 12573.

El municipio, para evitar engorrosas interpretaciones de la firma, inicio en el 2006 una vergonzosa acción judicial “Meramente Declarativa” ante el juzgado contencioso administrativo de San Isidro, para que sea la justicia, en definitiva, quien establezca la no aplicación de los limites de la ley 12573 a Cencosud S.A. en su desmedida pretensión. Las especulaciones son variadas y las suspicacias abundan.
Frente a este panorama La Asociación Vecinal presento al juzgado un recurso llamado “Amicus Curiae” con la intención de ayudar al juez al lograr un pronunciamiento justo y equitativo aportándole todos los antecedentes acumulados en 12 años de lucha. Fue rechazado por el juzgado el mismo día de su presentación sin ningún tipo de fundamentación. La misma suerte corrió la apelación presentada posteriormente. Aquí también las sospechas se multiplican.

Todo este desastre jurídico es evidentemente inconstitucional. Las 4 Ordenanzas irregulares y arbitrarias y el inexplicable decreto provincial son violatorios de derechos y garantías asegurados tanto por la Constitución Nacional cuanto por la Provincial. El artículo 41 de la C.N. reconoce a los habitantes el derecho a un ambiente sano, equilibrado y apto para el desarrollo humano. La Organización Mundial de la Salud recomienda entre 10 y 15 m2 de espacio verde público por habitante. Beccar no llega a 1 m2.

La calidad de vida se verá gravemente afectada por la contaminación ambiental, el incremento del nivel de ruido, el aumento de los gases tóxicos, la rotura de la trama urbana, el ataque a la forestación, la complicación del transito, la separación de barrios, la dinamitación de los útiles galpones de OSN, la rotura de pavimentos, la polución visual, etc.

El daño en lo económico y social de este colosal engendro pasa por el cierre masivo de pequeños comerciantes. Vamos a presenciar como mueren el carnicero, el verdulero y el ferretero del barrio, derrumbadosé el esfuerzo de toda una vida con la perdida de genuinos puestos de trabajo que se van a cambiar por unos pocos “contratos basura”.

Agrupémonos para la lucha contra este desastre ecológico y social. Como ciudadanos debemos exigir a los Concejales y al Intendente que, en resguardo a nuestros derechos, no se apruebe el proyecto del hiper y como comerciantes debemos concurrir a las Cámaras para reclamar un urgente y justo respaldo de nuestra condición, así como para requerir la aplicación de la ley 12573.



ASOCIACION DE VECINOS DE BECCAR Y SAN ISIDRO
MAYO 2008

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